Birding, Bird Watching, Patagonia Argentina

jueves, 5 de agosto de 2010

Aves de presa

Actitud y postura de alerta del Águila Mora. Oportunista de la liebre atropellada por un auto en la Ruta 40 entre Pilcaniyeu y Las Bayas.

Sin duda alguna y luego de acercarnos cuerpo a tierra, logramos tenerla a solo unos metros mientras desgarraba su presa ayudándose con sus poderas garras y su pico. Una garra puede alcanzar los dos centímetros y medio lo cual la dota de un arma temerosa. Nos permitió verla comer sin nunca dejarnos de sorprender por semejante estampa.

Una de nuestras rapaces preferidas, calidad de vuelo, poder, astucia y quedar prácticamente inmóvil con sus alas semi plegadas cernida en el cielo, son apenas algunas de las maravillas que siempre nos detiene a observarla.

Y no se queda lejos de todos estos halagos los juveniles que con su plumaje marrón da orígen a su nombre. Con el correr de los años va cambiando sus plumas pasando por varias fases hasta llegar al estado de adulto. Este volantón con solo un par de días fuera de su nido, sigue siendo alimentado por sus padres y se quedará por varios días en el área practicando vuelos y aprendiendo todo estrategias de caza a través de sus padres. La hembra considerablemente más grande que el macho.

La precisión en los aterrizajes y la maestría en vuelos sorprenden. Tarea nada fácil en un principio para los juveniles debiendo afrontar los fuertes vientos Patagónicos. En continuo aprendizaje comienzan a provecho de los mismos aprovechando las dinámicas que generan los vientos con paredones, riscos y lomadas. Estos generan una excelente corriente ascendente que aprovechan para mantenerse en vuelo prácticamente sin moverse. De igual modo aprovechas las térmicas producidas por corrientes de aire cálido. Tales condiciones son ideales para su vuelo donde con sus alas semi plegadas se quedan prácticamente inmóviles, corrigiendo con un simple entre abrir y cerrar de alas y su movimiento de cola. Con su privilegiada visión abarca un área grande en busca de un mínimo movimiento, una oportunidad para lanzarse en picada en un intento de capturar su presa.